El mundo de los videojuegos de terror ha tenido una gran diversidad de escenarios, historias y ambientaciones desde sus inicios, sin embargo, aunque podemos observar la clara influencia del trabajo literario de H.P Lovecraft en muchos títulos tales como Eternal Darkness: Sanity’s Requiem y Alone in The Dark, pocas veces tenemos la oportunidad de explorar de forma directa el mundo de los mitos de Cthulhu, aun cuando elementos como el enfoque en narración investigativa y travesías llenas de misterios arcanos y profanos han estado siempre presentes en los juegos del género de survival horror.
Call of Cthulhu es un juego creado por el desarrollador Cyanide Studio, basado en el juego de rol de mesa del mismo nombre, situado en el año de 1924, donde tomamos el rol de Edward Pierce, un investigador privado y veterano de guerra con la tarea de resolver el trágico accidente que tomó las vidas de los miembros de la familia Hawkins, residentes de la misteriosa isla de Darkwater, cercana a Boston, Massachusetts.
Para lograr esto, Call of Cthulhu nos presenta con mecánicas de juego donde necesitaremos de la pericia de Edward Pierce como detective para descubrir pistas escondidas y resolver acertijos, que cada vez nos esclarecerán más los eventos suscitados en la fatídica noche del accidente en la mansión Hawkins. El juego se desarrolla en primera persona, en donde, al comenzar se nos permite asignar puntos a varios atributos: investigación, psicología, elocuencia, fuerza, ocultismo, medicina y detección de ítems escondidos, los cuales influyen en las opciones de diálogo y eventos en el transcurso del juego. Es importante mencionar que tanto ocultismo como medicina solo pueden ser modificados manualmente al inicio del juego, y una vez iniciada la partida, se requieren de textos e ítems especiales para mejorarlos.
Durante la mayoría del juego nos veremos obligados a mantener conversaciones con los diversos habitantes de Blackwater, tomando detalles de las pistas y relatos que estos nos presenten, de una manera similar a juegos clásicos de aventura point and click, además de en algunas ocasiones encontrar pistas, artefactos y documentos, que a su vez nos permitirán entrar en secuencias donde Edward recreara los eventos ocurridos en la escena, revelando misterios y progresando la historia. Posteriormente, el juego nos introduce con secuencias donde deberemos evitar ser detectados y cerca del final con un poco de combate, sin embargo, estas secuencias más que agregar variedad al juego, provocan un cambio de ritmo que nos puede desconectarnos temporalmente de la atmósfera del juego.
El mejor aspecto de Call of Cthulhu es sin duda la historia. El juego logra de manera adecuada introducirnos a la mitología del mundo de Lovecraft, un mundo donde la naturaleza misma del conocimiento que adquirimos es tan incomprensible para las frágiles y simples mentes de los humanos que llevan a todos aquellos que se ven involucrados con ellos directamente a la locura, lo cual será particularmente notorio en nuestro personaje al obtener uno de los cuatro posibles finales, de los cuales ninguno podría ser considerado como un desenlace positivo.
Gráficamente, el juego es un poco inconsistente, ya que algunos ambientes están bien detallados, y cuentan con buenos efectos de partículas e iluminación que no solamente logran la inmersión, si no que pueden invocar un sentimiento de ansiedad, al presentar zonas tétricas y obscuras que serán iluminadas ya sea por un pequeño encendedor o una lámpara de aceite que necesitará ser reabastecida después de cierto periodo de uso. Por otro lado, las animaciones y los modelos de los personajes no están a la par con lo visto en esta generación de juegos, los movimientos de los labios de los personajes no coinciden con los diálogos, y las expresiones faciales son en muchas ocasiones inertes, sin embargo, el diseño de audio puede mitigar estos defectos, ya que los efectos ambientales y de sonido complementan de manera idónea a los escenarios obscuros y tenebrosos, provocándonos una sensación de constante acecho por parte de los horrores que merodean en las penumbras de Darkwater.
Técnicamente, Call of Cthulhu puede presentar algunos bugs gráficos en los modelos además de que en ocasiones vemos glitches como la carga incorrecta de textura, y en algunas ocasiones el framerate puede disminuir un poco, pero en general, el rendimiento es estable y el transcurso de nuestra partida no encontramos ningún error que comprometiera seriamente nuestra experiencia de juego.
Por desgracia, el juego cuenta con una historia corta, que toma aproximadamente de 6 a 8 horas en completar, siendo nuestras propias limitaciones para resolver los acertijos el único factor que influya en el tiempo necesario para completar el juego. Si bien, estos acertijos no presentan una gran dificultad, será necesario prestar atención a todos los detalles que encontremos en el juego, de lo contrario podremos encontrarnos con problemas para seguir progresando la historia.
Una vez concluido el juego contamos con la opción de comenzar una nueva partida para tomar decisiones distintas que nos lleven a un final alterno, sin embargo, la selección de otras opciones que previamente descartamos no modifican de forma significativa los acontecimientos del juego, la mayoría de los eventos son pre-programados, y se llevaran a cabo de la misma manera que en partidas anteriores, además de que, en partidas subsecuentes, notaremos que las variaciones en nuestros atributos tampoco juegan un papel importante en el desarrollo de juego, además de que la mecánica del medidor de cordura de nuestro personaje solamente sirve para obtener ciertas opciones que te permitirán obtener un final distinto, y en algunas ocasiones, nuestra visión se ve deteriorada por el estrés al que está sometido nuestro personaje. Por último, no se cuenta con una opción de selección de capítulo una vez concluido, lo cual nos obliga a completar de manera completa el juego nuevamente y tomar nota de las opciones que elegimos con anterioridad si queremos ver todos los finales posibles, volviéndose un proceso tedioso que no todos los jugadores estarán dispuestos a llevar a cabo.
Conclusión
Call Of Cthulhu cuenta con una historia interesante y bien desarrollada, captando los elementos claves de la literatura de horror cósmico típica de Lovecraft, pero una vez más nos demuestra la principal dificultad de adaptar este tipo de obra literaria a cualquier otro medio de entretenimiento: la idea de enfrentarnos a criaturas y conceptos tan aberrantes que la simple noción de su existencia es suficiente para perder la cordura no puede trasladarse de forma precisa a un medio donde, inevitablemente seremos testigos de estos eventos, siendo las ocasiones en el juego donde enfrentamos de forma directa a los elementos míticos las partes más débiles en la narrativa del juego, además, debido a su gran énfasis a la investigación, diálogo y lectura, es un juego difícil de recomendar para todos aquellos que no son fanáticos de la temática del horror, ya que puede resultar una experiencia lenta y un poco tediosa, sin embargo, para todos aquellos que gozan de las literatura de Lovecraft y temáticas ocultistas en general, es un juego que vale la pena checar.
Esta reseña fue realizada en PC. Puedes consultar los criterios de puntuación aquí.