Dentro del mundo del anime no es extraño que, cuando una serie logra ser exitosa, se creen películas sobre estas, sin embargo, pocas veces continúan la historia principal del material que están adaptando, y más bien fungiendo bajo el nombre de OVA (Original Video Animation), que suelen ser historias breves autocontenidas, generalmente no canónicas para el resto de la saga. Tras el rotundo éxito de Demon Slayer-Kimetsu no Yaiba, un largometraje de esta serie era inevitable, y en esta ocasión el estudio Ufotable optó por adaptar el siguiente arco de la historia, que continúa de manera directa a la temporada del anime.
Sinopsis
La película comienza inmediatamente al final de la serie de animación, cuando Tanjirō, Nezuko, Zenitsu, e Inosuke abordan un tren con la misión de unirse al pilar de llamas Kyōjurō Rengoku en su búsqueda por un demonio que ha asesinado a muchos Demon Slayers.
Inmediatamente, ellos caen víctimas de los poderes del demonio Enmu, el Kizuki que posee el rango 1 de las lunas inferiores, los cuales han atrapado a todos los pasajeros y a nuestros héroes en un sueño infinito, del cual solo podrán despertar tras derrotar al enemigo. Durante el transcurso de estos sueños, nuestros protagonistas deberán de encontrar una manera de despertar, además de luchar también contra los pasajeros que se encuentran bajo el encantamiento de Enmu.
En el transcurso de la película podremos observar cómo las habilidades demoniacas de Nezuko le permiten ayudar al resto del equipo. A su vez, podremos ser testigos de las habilidades del pilar de llamas por primera vez en combate, además de que, en el acto final de la película, el equipo se enfrentará un desafío aún mayor.
Y aunque la historia pueda parecer un poco superficial, el crecimiento que podemos observar en algunos de los personajes se encuentra bien desarrollado gracias a la ya clásica estrategia narrativa de aprender de los retos y adversidades más difíciles de enfrentar, sin duda alguna al terminar la película podremos observar a personajes más maduros, todo en un transcurso de 117 minutos.
Producción audiovisual
Como es de esperarse, la cinta de Demon Slayer – Kimetsu no Yaiba: Mugen Train cuenta con excelentes valores de producción, en especial en lo que se refiere a la animación de todas las batallas, mismo que ha estado presente desde la primera temporada de anime, con coreografías en donde resalta la acción y efectos especiales, en particular al momento de realizar las técnicas especiales de respiración de cada cazador, mismas que despliegan habilidades sobrehumanas repletas de efectos de partículas y colores que deleitarán la pupila de todos los espectadores.
Todo el elenco original de actores de voz japoneses ha regresado a la película para interpretar a nuestros personajes favoritos, brindándonos momentos cargados de todo tipo de emociones que sin duda alguna nos provocarán momentos de intensa alegría, suspenso y porque no, hasta tristeza.
A pesar de esto, Demon Slayer – Kimetsu no Yaiba: Mugen Train cuenta con algunos puntos negativos, entre los cuales destaca el uso de CGI, o imágenes generadas por computadora, las cuales tienen una calidad que deja mucho que desear, y contrastan de una manera negativa, en especial al compararse con las extensas peleas y coreografías realizadas por un método de animación más tradicional. De la misma manera, el soundtrack carece del popular opening de la serie, además de que, en algunas ocasiones, se queda a un paso de representar adecuadamente la epicidad de las batallas que presenciaremos.
Conclusión
Demon Slayer – Kimetsu no Yaiba: Mugen Train es sin duda una de las mejores películas de anime que hemos observado recientemente, prueba de ello está en que ha logrado convertirse en la película más taquillera del género en toda la historia de Japón. Con una gran animación y una trama sencilla.
Mugen Train es una película que puede ser disfrutada por cualquiera, aunque es importante mencionar, que, al ser una continuación directa de la primera temporada, el haber visto previamente el anime permitirá que estemos mucho más apegados a los personajes. El uso de CGI es un punto negativo ya que, en comparación al resto de la animación, este se ve fuera de lugar.
Si bien Demon Slayer – Kimetsu no Yaiba: Mugen Train no cuenta con una historia que va a revolucionar el género, los retos a los que se enfrentan los ya favoritos Tanjirō, Nezuko, Zenitsu e Inosuke acompañados por el carismático e inspirador pilar de llamas Kyōjurō Rengoku, dejarán a todos los espectadores satisfechos, sintiendo más empatía por estos personajes que han demostrado que, sin duda alguna, trascenderán en la historia del manga y el anime.
Demon Slayer – Kimetsu no Yaiba: Mugen Train es una película que cualquier fanático del anime, y en general de una buena historia con una excelente ejecución de la clásica batalla del bien contra el mal, no deberá perderse.
El acceso a la función de prensa de Demon Slayer – Kimetsu no Yaiba: Mugen Train fue posible a KEM Media. Puedes consultar los criterios de puntuación aquí.